Una guitarra, un micrófono y una cámara de vídeo. A veces son las únicas herramientas que son necesarias para saltar del anonimato en el piso modesto de tus padres a ser reconocido y alcanzar éxito, incluso a escala internacional.
Nada de grabar laboriosas maquetas y enviárselas a decenas de discográficas que la rechazan sin haberla escuchado. Nada de buscarse representantes bien situados que logran cinco minutos de atención con algún productor muy atareado. Nada de castings ni mendigar para hacer una prueba musical.
Solo un artista dirigiéndose de la forma más rudimentaria a su público. Sin intermediarios ni críticos que aplauden o destrozan carreras. Nada de costosas grabaciones, campañas de promoción y mil entrevistas en la radio para hacerte un hueco en el mundo de la música.
Justin Bieber, Pablo Alborán o Wendy Sulca lo tuvieron claro: ya no es necesario pasar por todas y cada una de las fases de la cadena de montaje donde se fabrica un artista. Para conectar al cantante con su público solo hacía falta YouTube.
Pablo Alborán, cantante desde los 12 años
Después de recibir formación en instrumentos como el piano y guitarra, aprendió a cantar rodeándose de músicos profesionales en su Málaga de nacimiento.
Con doce años ya había compuesto canciones como Amor de Barrio o Desencuentro. A los catorce años empezó a colgar vídeos donde cantaba a través de MySpace.
Pero el éxito le llegó cuando decidió colgar sus vídeos como artista a través de YouTube. Fue así como se dio a conocer interpretando Solamente tú, un éxito que logró alcanzar más de 180 millones de reproducciones y le diese a conocer en el mercado español y latinoamericano.
La cantante Diana Navarro se convirtió después en su madrina musical después de que Alborán versionara el tema de la cantante que llevaba por título Déjame de volverme loca.
Tras darse a conocer en YouTube, Pablo Alborán se ha convertido en uno de los artistas con mayor éxito actualmente en España, y ha sido galardonado o nominado a muchos premios artísticos en su todavía corta carrera.
Justin Bieber, todo un ídolo para los adolescentes
Mientras visionaba, quizás medio aburrido, vídeos de YouTube a la caza de algún talento desconocido, el ejecutivo musical Scooter Braun se tropezó con un jovencísimo cantante que, guitarra en mano, interpretaba versiones libres de temas de otros solistas.
Apenas cumplidos los 15 años, Justin Bieber entró por la puerta grande en el mundo de la música con la publicación de su primer sencillo, que llevó por título One Time. Con este disco logró colocarse en los primeros puestos de las listas de éxitos en más de una decena de países, y fue el trampolín que le ha llevado a la fama hasta hoy día.
Tras mostrar interés por el fútbol, el hockey y el ajedrez, Justin Bieber aprendió a tocar de forma autodidacta la batería, la trompeta y, por supuesto, la guitarra.
Fue la madre de Justin la que primero descubrió el talento innato de su hijo y la que colgó un vídeo del artista para que sus más allegados pudieran ver al joven Bieber.
Juan Solo, de estudiante de medicina a cantante
Dicen que Juan Solo comenzó a amar la música escuchando a sus ídolos Rubén Blades, Juan Luis Guerra o Poncho Sánchez mientras se alojaba los fines de semana en el rancho de sus abuelos.
Después de hacer pinitos en obras musicales en el estado de Puebla, cursó estudios de medicina, pero abandonó la carrera a los dos años de haberse matriculado.
Viajando por varias ciudades de México con su grupo versionando temas de otros cantantes populares, conoció al productor Rafa Rodríguez.
Rodríguez le animó a grabar tres demos con los temas que había compuesto el propio Juan Solo, e intentaron infructuosamente que alguna compañía discográfica estuviera dispuesta a publicar los temas.
En 2012 sube a Youtube el tema Querido Corazón¸ el cual alcanza un gran éxito a las pocas semanas.
Austin Mahone, el cantante que subía sus propias versiones de otros temas
Cantante y compositor estadounidense, Austin Mahone saltó a la fama en verano de 2010 a través de la plataforma YouTube.
Es curioso que, si Justin Bieber se dio a conocer haciendo versiones de otros cantantes famosos, Mahone se hizo popular también interpretando a otros artistas célebres, entre ellos a Justin Bieber.
Gracias al enorme éxito de estos vídeos, su madre logró que firmara un contrato cinematográfico con la compañía Universal Music Group.
YouTube fue la cuna de su lanzamiento y, ocho años después, Austin Mahone ya tiene editada una numerosa discografía, ha participado en shows televisivos, ha actuado como actor en distintas series y ha cosechado multitud de premios y nominaciones de galardones musicales.
Ed Sheeran, de YouTube a dar conciertos por todo el mundo.
Empezó a amar la música escuchando los discos de Bob Dylan y Eric Clapton. Ed Sheeran logró convertirse en un fenómeno mundial después de unos comienzos poco prometedores y actuar en pequeños locales como telonero, grabó un disco independiente y mostró sus cualidades artísticas en las noches de micrófono abierto en locales para pequeños auditorios.
Después de viajar a Estados Unidos y tener mejor acogida, en 2010 logró la notoriedad pública después de subir a YouTube vídeos con sus actuaciones.
De regreso a Inglaterra, su vídeo You Need Me, I Don´t Need You alcanzó tal éxito que se emitió muchas veces por el canal SB TV. Gracias a ello, el rapero Example le invitó a unirse a su gira musical que le llevó por todo el Reino Unido.
Wendy Sulca, para muchos la nueva Shakira
La peruana Wendy Sulca también se ganó la lotería musical cuando comenzó a subir sus vídeos musicales en YouTube.
Temas como “La Tetita”, “Papito” o “Canta Conmigo”, son algunos de los grandes éxitos logrados por Wendy, alcanzando reproducciones hasta un número superior a los diez millones de visionados.
Ya con ocho años su madre comenzó a promover su carrera, después de que su padre -que la inició en el mundillo artístico- muriera en un accidente de tráfico.
Además de ser un ídolo musical, Wendy Sulca ha hecho cameos en cine y televisión como su participación en la serie peruana Vacaciones en Grecia.
A pesar de no haber obtenido el aplauso de la crítica que la considera una artista mediocre, Wendy sí cuenta con una legión de seguidores cada vez más numerosa que comenzó a crecer cuando echó abajo la puerta de la fama a través de YouTube, algo que lograron todos los artistas de este artículo que un día decidieron colgar sus vídeos en la madre de todas las plataformas de vídeos.
